martes, 30 de agosto de 2011

Puedo escribir y no disimular.No se trata de narrar mi vida, si no de hacer imaginar otras. De hacer sentir emociones, expresar ideas y experiencias que nunca te has atrevido a realizar, No es mentir. Es cambiar la realidad, maquillar el mundo y bucear entre las letras.
Me perdí en un cruce de palabras, no encontraba la realidad, soñaba lo que escribía, mi pensamiento no obedecía ni la orden más simple. Sólo veía una letra tras otra. Huyendo de la realidad, alejando los problemas y esos temas tan persistentes en mi cabeza. No quiero pensar, quiero sentir. No quiero volver y ver que nada ha cambiado. Esta noche me quedo aquí. Donde solo existen las palabras.
Ellas no te reprochan, no exigen, no hieren intencionadamente, sólo cuando alguien las lanza con despecho. Me quedo aquí, escuchando una canción detrás de otra sin pararme siquiera a entenderlas. Remendado este alma, curada ya de espanto. Exagerando si me da la gana. Añorando un abrazo. Sí, esta noche dormiré aquí, donde las sombras conviven con la luz, pero queda la certeza de saber que son sombras, Aquí, donde no existe el engaño.

domingo, 28 de agosto de 2011

Reflexiones.

Dicen que a través de las palabras, el dolor se hace más tangible; que podemos mirarlo como a una criatura oscura, tanto más ajena a nosotros cuando más cerca la sentimos.
Las palabras tienen un poder inmensurable, son capaces de hacernos sentir sensaciones tan dispares como alegría, desdicha y nostalgia.
Cuando escribimos transmitimos nuestros sentimientos e impregnamos el papel en su aroma. La tinta sale directamente de nuestros dedos, al igual que la sangre que sale de nuestro corazón. Porque los sentimos ahí, en nuestras propias vísceras.
Palabras de otros, palabras vacías y carentes de significado, que diferencia al compararlas con las que nacen de nosotros.
Hoy sólo me tengo a mí, con mis miedos y preguntas, con mi mente inquieta y defectuosa y con todas las palabras que salen de ella. Terapia de choque contra todos esos sentimientos contradictorios.
Hoy voy a rescribir la historia, desahuciar mis fobias, como antes hicieron muchos otros mejor y peor y como lo seguirán haciendo hasta que esta sociedad degradante pierda el sentido de las palabras.
Hoy ni siquiera busco que me escuchen, tan sólo escribo para mí.
Esto no es un mensaje de optimismo ni esperanza. Tampoco significa que hoy este al borde del abismo, en verdad estoy bastante bien, contenta diría yo. Si mis pensamientos pueden parecer un poco oscuros es, quizás, por que me gusta rozar esa parte oscura de vez en cuando. Ya leí una vez una cosa que me pareció de lo más acertada y hoy acabo así:
Una incursión ocasional por alguna emoción negativa hace que sentirse normal resulte muchos más dulce.

sábado, 27 de agosto de 2011

Voy a fumar hasta que mi pulmón decida dedicarse a otra cosa.

Voy a bailar hasta quedarme sin zapatos y puede que aún luego siga bailando descalza. Voy a beber para que todo me de vueltas y reírme no sea ningún problema. Voy a vivir como si fuera mi último día en la tierra.
Cantaré hasta que me duela la garganta. Reiré tanto que luego no aguantaré las agujetas. Seré tan bipolar como esta puta vida. Voy a poner mis miedos en fila india y les daré una patada que los mande lo más lejos posible. Voy a dar vueltas hasta caer mareada. Voy a amar hasta que duela. Voy a llorar como nunca nadie antes a llorado, y de tanto llorar anestesiaré mi corazón para olvidar los recuerdos y lo haré de piedra para que nadie más pueda llegar a él.


lunes, 22 de agosto de 2011

Sastre de sonrisas.

Un oficio un poco extravagante y bastante inusual. Pero muy necesario en estos días.
Quién no necesita de vez en cuando un arreglo en su sonrisa, un pequeño tirón que la haga más grande o alguien que la haga de nuevo. Y aquí es donde entra el sastre de sonrisas. No se necesitan muchas herramientas para arreglar una sonrisa pero sí una infinita paciencia y amor por tu trabajo. No es fácil, cada cual tiene su sonrisa rota por una razón. Aquí no hacemos rebajas ni ventas al por mayor, pero tampoco hay que pagar un precio muy alto. Es más, cualquiera se puede pasar un ratito y leer alguna de mis paranoias varias que le suba la moral, o con la que sentirse identificad@.  Sin embargo es un trabajo gratificante este el de arreglar sonrisas, frustrante cuando no lo consigues, lo que viene siendo normal cuando como yo tienes la gracia en el ..., pero siempre es bonito ver a alguien sonreír de nuevo. Y es que nada puede hacernos perder la sonrisa, puedo encontrar cuatrocientos y un motivos para sonreír día a día, día sí y día también. Sonríe, vive y se feliz. Esa es mi filosofía y si un día no consigues encontrar ningún buen motivo para hacerlo, si piensas que todo es gris y los rotuladores están gastados, búscate un buen sastre que arregle tu sonrisa y sí no, como último recurso siempre te puedes pasar por aquí.

domingo, 21 de agosto de 2011

Sin tema.

No siempre es fácil sacar un tema para escribir.
No siempre nuestro estado de ánimo se compone de depresión total o de un optimismo sin reparos.
Aveces tienes un día normal, sin grandes sucesos. Días de calma tras una tormenta de sentimientos.
En esos días piensas que tienes suerte, que al fin y al cabo, no te puedes quejar.
No te apetece hablar de amores, sonaría demasiado falso en días que en los que eso ni te va ni te viene. Amigos que sigues echando de menos y necesitas...no, no quieres rayaduras de cabeza. Hay temas que es mejor no tocar.Son inflamables.
Música? No, hay que erradicar el tópico de que la adolescencia se basa en chicos y música. Hay más cosas que nos preocupan y en las que pensamos, Peor aún así, solo para probar que me equivoco, el maldito tema sigue sin salir. Pero de un tema tendrá que ir ¿no? Porque no puede ser un texto sin sentido, un llamemoslo texto sin clasificar, O sí :)
Escribo yo, mando yo (Guay)
Pues nada, ya es oficial, queda inaugurado un texto sin tema.
Y para finalizar, como todo buen texto sin tema, una foto chula (sin sentido,claro) y un final que viene aquí.

sábado, 20 de agosto de 2011

Días grises, noches largas, remordimientos y demás mezclas.

Un día estás tan tranquilo viviendo tu vida y al siguiente ya no estás.
De un minuto a otro todo cambia.
Puede que estés enamorado, ya puedes tener diecinueve años o cuarenta; podías ir un viernes de fiesta, a casa de un amigo o volver del trabajo.
Todo se acaba tan rápido como empezó.
Ya de nada valen las facturas no pagadas, los problemas no resueltos o las palabras no dichas. No te retienten familia ni amigos.
Es asombroso como todo sigue igual, la vida no cambia. El universo no emite ninguna señal acerca de las vidas que se van, Y los que se quedan, al principio no lo creen, luego empiezan a echar en falta a esa persona y a los dos años ni se acuerdan de cuando se fueron.
Parece cruel e injusto pero es exactamente así.
Parece irreal y sí, al principio duele y cuesta, pero tarde o temprano todo sigue normal, no igual pero sí lo suficientemente parecido como para permitirnos vivir.
En cambio cuando te vas, te vas. No hay más vueltas de hoja. Ni más soluciones.
Puede que realmente haya otra vida, pero es inevitable que primero dejemos esta.

viernes, 19 de agosto de 2011

Muerte de un superhéroe.

Todas las muertes son feas. Incluso las estrellas que consumen sus gases y se extinguen a través de una supernova, contaminan una zona espacial tan grande que luego no podrías ni regalar ese terreno. Sí, el chico que hay en el puente se compara con estrellas que se enfrían mientras aguarda a que los distintos elementos que componen sus ansías de morir- asco, cólera, dolor, nausea, fragilidad, frustración, injusticia, envidia, soledad, arrepentimiento- se fusionen en una fuerza lo bastante fuerte como para impulsarle. Suelta una mano, pues le parece que ha llegado el momento de ponerse serio. A medio camino de allí abajo. A medio camino de la no existencia. Basta de darle vueltas. Di adiós, mundo,  a un monstruo, a alguien que ni siquiera está lo bastante entero para llegar a los 16 años, a un perdedor en todos los aspectos, pero que se va con estilo, diciendo goodbye, au revoir y sayonara a todos los caminos no pisados y futuros no vistos, a todos los sujetadores no desabrochados y a todas las chicas no besadas, adiós a todas las lecciones no aprendidas y errores no cometidos y un caluroso "a tomar por culo" a todas las torturas prácticas médicas y a todas las humillaciones y finalmente un "hasta luego" a toda la jarana humana que apenas se dará cuenta de la ausencia de un trozo de carne de 50 kg alrededor de un alma.


- Anthony McCarten
Hay temporadas raras, en las que simplemente te dejas llevar, sin analizar tus sentimientos.
Piensas -A la mierda con todo!
Haces lo que quieres sin pensar en la gente y puede que ni si quiera en tí misma.
Sólo sabes que hoy estás bien, te da lo mismo el mañana.
Pero llega un momento en el que te paras a pensar, y ya no sabes que pensar, ya no sabes lo que sientes, no sabes que ha ocurrido exactamente en ese tiempo en el que has estado sin pensar las cosas, llevándote por tus impulsos.
No sabes como explicarlo pero en realidad no te importa, hay lo que hay y cada cual siente lo que siente, lo sepa en ese momento o no.
Llevo mucho tiempo sin escribir, por miedo a ponerme a pensar en estas semanas pero creo que no he estado más a gusto en todo el verano. No se porque  pero me siento bien, no me preocupo por nada y me guío por lo que me apetece en cada momento.
Y hoy no me apetece buscar un final.