sábado, 19 de noviembre de 2011

Nos pasamos la vida usando esta palabra. No llores. No corras. No grites. No bebas. No fumes. No enredes. No copies. No. No. No. Se pasan la vida negándonos cosas. Y nosotros mismos igual o peor. No le miro. No siento. No quiero. No voy. No como. No sonrío, no me apetece. Mi pregunta es ¿Vivimos?
Yo creo que nos limitamos a existir. Nacemos, nos dan de comer, nos visten, nos educan, nos imponen reglas y nos dicen que hacer en cada momento. Luego ese papel pasa a los profesores, amigos, pareja y finalmente a tus propios hijos. Y llega el día en el que piensas. ¿Que coño he hecho por mi vida? Cuando estás completamente seguro de que has tomado una decisión por ti mismo? Sin normas, sin negaciones, sin obligaciones, instintos naturales, recomendaciones, obligaciones...
Nada, no has hecho nada. Nos limitamos a llevar una vida marcada, predecible.
La juventud, es nuestra pequeña manera de contribuir, de decir no!
Pero al final, todos acabamos "por sentar la cabeza".



jueves, 17 de noviembre de 2011

Nunca supe que hacer para que el dolor no amargue.

"La felicidad es jabonosa, se escurre entre los dedos. Pero a los problemas uno puede aferrarse, tienen asidero, son ásperos,duros."

domingo, 13 de noviembre de 2011

Puede alguien decirme donde están los errores baratos? Los mios salieron muy caros.

Por miedo a perderte no quiero estar contigo.
Estarás contento, al final me enamoré de tí.
Yo que me las daba de liberal, de ser una chica sin ataduras...te miro  y siento como cada centímetro de mi piel está conectado a tí.
Pasas más tiempo en mi mente que en tu casa.
Se que me quieres, pero no se sí de la manera que yo deseo. No sé si te quiero, aunque todo indique que sí.
Y no me gusta, no me gusta esa sensación de depender de alguien. Odio mi cara de idiota cuando hablo de tí y odio sentirme mucho más entera por el simple hecho de hablar contigo. Yo nunca he sido así, odio ponerme tan ñoña. Creo que es la primera vez que reconozco esto. El problema es que eso no me hace sentir mejor.


domingo, 6 de noviembre de 2011

I build my own way

El viento en la cara me devuelve todas mis energías. Voy caminando hacia el sol. Ni a tres ni a quince metros sobre el cielo, voy a ras del suelo, pisando tierra firme. He descubierto que así los golpes duelen menos.
Te hecho de menos, pero eso ya no me impide avanzar. No me desanimo, voy dejando atrás amigos y enemigos, pasiones, ilusiones, disgustos, abrazos, lágrimas, besos, todo lo que tenga algún valor sentimental. No los necesitaré allá donde voy. Tampoco necesito un cuerpo, ahora viajo cual espíritu etéreo, cualquier soplo de aire me hace seguir adelante. Una música me acompaña, y es raro, parece salir de mi interior, va sonando acorde a mis estados de ánimo. No siempre estoy tranquila. A veces, tengo miedo. El camino es largo. Pero estoy segura. Respiro hondo y continuo. Aún queda mucho por caminar.