Basta de apariencias, hoy toca hablar de sentimientos.

Little Death.

Sentimientos que sabes que están ahí, pero no te atreves a ponerles nombre. Como si ignorándolos fueran a volver a la oscuridad, maldita ingenua. La vida te enseñó que no es posible esconder lo que sientes por mucho tiempo, que tarde o temprano todo sale a la luz. Por eso hoy lo escribo, para organizar mi mente alocada. Puede que no sirva de nada, pero el ruido de mis dedos al golpear el teclado de manera incesante junto a la música que suena  en mis oídos me ayuda a pensar. Me relaja, dejo de ser yo para ser parte de las palabras, de esas que nos atrapan y no nos dejan continuar hasta que no las hemos desenredado y les hemos dado una forma, una historia, un sentido, Todos buscamos nuestro sentido, hasta las palabras. Puede que sobretodo las palabras.
Sentimientos. Que putada esto de sentir ¿no?

Reflexiones baratas

Hay desastres que pueden ser evitados.
No todas nuestras acciones pueden ser evitadas, algunas veces para ser cosa de fuerzas mayores que arrastran a tus actos y te das cuentas de que eligieses la opción que fuese, el resultado hubiese sido el mismo. No sé si creeréis en el destino, porque yo misma tengo mis dudas. Aún así sé con certeza que hay consecuencias que se pueden evitar.
No se puede estar toda la vida pensando en las consecuencias, hay que pensar, es verdad. Pero a veces no está mal pensarse las cosas dos veces, pensar en los motivos que te llevan a hacer eso en concreto y las consecuencias que tus posibles actos puedan tener. A veces hay que pensar en las personas que te importan.

Tú no pensaste en nadie. ¿Verdad?

El mundo gira y a mi no me avisa.

Born to die.

Se levantó empapada de sudor y con una fuerte presión en el pecho. Se incorporó con rapidez, escalofríos recorrían su cuerpo y su corazón parecía querer salir de su pecho. Sentía un frío helador subiendo desde sus manos y su cabeza, en cambio, se asemejaba a una tetera a punto de hervir.
Se sentó en la cama, no conseguía respirar. Una presión iba aumentando por su pecho, llenando sus pulmones de angustia, de un miedo irracional que no lograba entender. Rompió a llorar, lágrimas saladas inundaban su cara y llenaban su boca de un sabor amargo.
Poco a poco lograba calmarse, pero esa sensación seguía ahí.
Se levantó apresuradamente y busco papel donde escribir lo que acababa de suceder. Necesita escribirlo, volcar toda la variedad de sentimientos que había sentido en un papel hacía que pareciera menos real. Como si al escribirlo pasara a otra dimensión, dejara por un momento de ser la protagonista para ser una simple espectadora más. Solo necesito un par de minutos para escribir lo ocurrido, aunque tardaría bastante más en poder comprenderlo.

Pretendo vivir toda la vida. O morir en el intento.

No hay nada peor que una página en blanco. Y su vida llevaba demasiado tiempo vacía, y ya era hora de llenarla. Nada de grandes cambios, está vez no, Ilusiones, pero en pequeñas dosis que luego ya se sabe, Pequeñas alegrías, pequeñas metas logradas, proyectos.
No voy a complicarme más. Que quiero una cosa, la pido. Que quiero hacer algo, lo hago. Porque al fin y al cabo la vida ya es suficientemente complicada como para dificultar aún más las cosas. Hoy es un buen día para empezar a vivir mi vida. Hoy como cualquier otro. Por eso no pienso desaprovechar mi tiempo. Llevo mucho tiempo sin cambiar de página, y no voy a pasarla, no voy a cambiar de libro. Empezaré a escribir el mio propio, uno en el que solo decida yo. Perdonar mi abandono total por el blog. Os prometo que intentaré compensaros.